Acabé de leer El Legado, de Blanca Miosi. Es una novela que te atrapa desde el comienzo de tal forma que no sabes en qué punto dejarla para retomarla después; te cautiva. Está magníficamente ambientada y documentada, tanto, que en la primera parte, cuando el mago Erik Hanussen tiene sus encuentros con Hitler, no es fácil distinguir qué es real y qué salido de su imaginación. Ambos personajes de por sí ya son bastante misteriosos, pero hay una vuelta de tuerca más, y es el señor de Welldone, personaje fascinante donde los haya, con un papel corto, intermitente e intenso, pero preponderante desde las sombras. Desde el mismo momento que se presenta ante Hanussen, cuando éste todavía es un mago que realiza trucos en un circo y Welldone lo instruye en el verdadero ocultismo, hasta el final, muchos son los acontecimientos que desencadenan sus profecías. Éstos te hacen plantearte bastantes cosas, el destino, el libre albedrío, y la ambición, entre otras.
La novela pasa por distintas épocas y varias generaciones, que la autora maneja con maestría, así como elegante prosa. Las épocas están estupendamente recreadas, se nota el trabajo que se ha tomado en documentarse; los personajes bien perfilados y los diálogos son magníficos, se retratan ellos mismos al hablar; y todo, junto al argumento, se entrelaza de forma sólida sin fisura alguna. Como en un puzzle bien armado.
El final, no quiero revelarlo, pero diré que tuve que leerme los últimos capítulos del tirón, desde la aparición de la tercera generación a la que hace referencia esta maldita profecía, en Oliver. La intriga y el misterio que la envuelven no me dejó otra opción. También la encontré muy visual, como si pudieras verla en una película, sobre todo, la primera parte, la de la época de la segunda Guerra Mundial y el final. Tiene misterio e intriga, elegancia y toques de glamour, una buena combinación para verla en la pantalla.
Me ha encantado tu novela, Blanca. Te felicito.”
La novela pasa por distintas épocas y varias generaciones, que la autora maneja con maestría, así como elegante prosa. Las épocas están estupendamente recreadas, se nota el trabajo que se ha tomado en documentarse; los personajes bien perfilados y los diálogos son magníficos, se retratan ellos mismos al hablar; y todo, junto al argumento, se entrelaza de forma sólida sin fisura alguna. Como en un puzzle bien armado.
El final, no quiero revelarlo, pero diré que tuve que leerme los últimos capítulos del tirón, desde la aparición de la tercera generación a la que hace referencia esta maldita profecía, en Oliver. La intriga y el misterio que la envuelven no me dejó otra opción. También la encontré muy visual, como si pudieras verla en una película, sobre todo, la primera parte, la de la época de la segunda Guerra Mundial y el final. Tiene misterio e intriga, elegancia y toques de glamour, una buena combinación para verla en la pantalla.
Me ha encantado tu novela, Blanca. Te felicito.”